Jugar “mejor” no es adivinar, es medir. Con tres KPI simples —coste por 100 giros, pico de saldo y drawdown— conviertes una sesión de azar en una experiencia controlada. Añade bloques cortos y una unidad fija del 1–2 % para eliminar impulsos.
1) Coste por 100 giros (C/100)
Estima cuánto “cuesta” avanzar. Si tu C/100 sube por encima de lo previsto, baja variancia o pausa el bloque.
- Objetivo: mantener C/100 dentro de tu rango tolerable.
- Acción: si C/100 > rango, reduce apuesta (misma unidad %) o cambia a un título más estable.
2) Pico de saldo (Peak) & “Vault”
En cada nuevo máximo de saldo, aparta el 20–30 % a un “vault”. Ganancia guardada ≠ tentación reinvertida.
- Regla: sólo puedes mover del vault fuera de la sesión, nunca de vuelta el mismo día.
3) Drawdown (DD) aceptable
Define una caída máxima desde el último pico: p. ej. −10–15 %. Si se alcanza, fin de bloque sin discusión.
Método 10/15: bloques que bajan el pulso
- 10–15 minutos por bloque con temporizador visible.
- Unidad fija 1–2 % de la banca por acción; sin escalados “porque sí”.
- Mini-log: juego, C/100, pico, DD, estado de ánimo (1–5).
Errores que arruinan los KPI
- Subir apuesta tras pérdidas (chasing) — acelera el DD, no el RTP.
- Cambiar juego y tamaño de apuesta a la vez — pierdes lectura del C/100.
- Romper el vault — ganancias “en pantalla” no son ganancias reales.
Conclusión
Mide poco y útil: C/100 para el ritmo, pico+vault para proteger, DD para cortar a tiempo. Con bloques cortos y una unidad fija, tus números serán más claros y tu sesión, más tranquila. 18+ · Juega con responsabilidad.